Todo ambiente Montessori requiere de material científico-pedagógico. La característica principal del material Montessori es su carácter autocorrector, el cual permite la autoeducación, o la formación autónoma y personal del aprendizaje, característica importante del Método Montessori. Cada material Montessori se presenta para responder a la necesidad de orden que tienen los niños en determinadas edades.
El material Montessori se organiza en el espacio, de forma que los niños sean los protagonistas de su aprendizaje y que sepan usar el material sin depender constantemente de sus educadores. La totalidad del ambiente Montessori debe, además, mantenerse escrupulosamente ordenado, ya que el orden externo refuerza el orden de la mente del niño.
Los materiales Montessori de desarrollo pueden entenderse como un gimnasio tanto para la mente como para la formación.